En 2013, nos enteramos que la vigilancia digital por los gobiernos del mundo no conoce límites. La NSA y otras agencias de investigación vienen capturando nuestras llamadas telefónicas, haciendo seguimiento de nuestra ubicación, escudriñando nuestras libretas de direcciones y haciendo acopio de nuestros correos electrónicos. Lo hacen en secreto, sin la adecuada supervisión pública, y en violación de nuestros derechos humanos. No vamos a tolerar esto más. El martes 11 de febrero, el mundo ha dicho basta.
Fundación Karisma y el colectivo RedPaTodos con la colaboración de Mozilla Colombia se han unido a la campaña "Internet sin chuzadas", pidiendo el fin de la vigilancia descontrolada en el país y en el extranjero. También han lanzado un hermoso video sobre cómo funciona el espionaje en línea y lo que puede hacerse para protegerse en contra de ella. Míralo con atención y difúndelo.
Si desean conocer más sobre la situación de la vigilancia masiva en Colombia, lee el siguiente informe elaborado por nuestros aliados la Fundación Karisma:
Anuncian jornada de protesta mundial en contra de sistemas de vigilancia masiva
Un nuevo evento de chuzadas, esta vez a los negociadores del proceso de paz en La Habana, Cuba, fue destapado por la revista Semana en días pasados, y el escándalo apenas comienza. La vigilancia masiva es una amenaza latente en el contexto actual, pero lo más preocupante es que los ciudadanos no cuentan con un marco jurídico que permita reclamar sus derechos frente a la recolección de datos y violaciones a la privacidad.
La vigilancia masiva no es una práctica aislada. Las filtraciones de Edward Snowden develaron que existe la tecnología para vigilar a millones de usuarios de Internet. La Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA, por sus siglas en inglés) y otras entidades similares, vigilan masivamente miles de comunicaciones bajo el argumento de la “seguridad nacional” y la “lucha contra el terrorismo”.
El escenario generalizado es la ausencia de garantías de los ciudadanos frente al poder del Estado. La privacidad no se está respetando como lo es: un derecho humano fundamental. Mientras tanto es evidente la debilidad del Estado para evitar que la información y datos recopilados se utilicen sin control para fines no deseados, como la persecución selectiva.
Este escenario movilizará a miles de activistas, ONG del mundo y diferentes organizaciones de derechos humanos en una PROTESTA GLOBAL el 11 de febrero de 2014, en el marco de The Day We Fight Back (El día que dijimos basta, en español). Ese día, miles de usuarios de Internet demandarán el fin de la vigilancia masiva en todos los países, gobiernos y Estados, dejando de lado las fronteras geográficas o políticas.
La protesta busca recordar el poder de las manifestaciones contra la saga de la #LeyLleras en Colombia, y la batalla contra #SOPA y #PIPA en USA, en las que los usuarios de Internet, alrededor del mundo, lograron la victoria. Tal como lo señaló el desaparecido líder activista Aaron Swartz, ese día “nos hicimos héroes de nuestra propia historia.” El llamado internacional declara: “Podemos acordar una fecha, pero necesitamos a todos, a todos los usuarios del Internet Global, para hacer de esta protesta un movimiento”.
En Colombia queremos un #InternetSinChuzadas.
Las chuzadas del DAS y la creación de un grupo administrador de la plataforma de monitoreo PUMA despertaron, no hace mucho tiempo, cuestionamientos sobre la forma y el alcance de la vigilancia estatal. Esto cobran nueva importancia al conocerse detalles sobre la operación “Andrómeda”, fachada del Ejército Nacional desde donde se adelantaban actividades de vigilancia.
En sus primeras declaraciones sobre el caso “Andrómeda”, el presidente Santos anunciaba una investigación a fondo declarando que "No es aceptable que la inteligencia se haga contra los ciudadanos legítimos, contra la oposición política, y menos contra funcionarios del propio Estado". Sin embargo, reafirmó el uso de la vigilancia masiva para casos de seguridad nacional “ porque es a través de la Inteligencia, sobre todo en un mundo que está avanzando tanto en la tecnología, como mejor se protege a un Estado o la seguridad de los ciudadanos” mencionó el primer mandatario.
En una nueva declaración, el presidente afirmó que “las fachadas de Inteligencia, como la que se allanó son totalmente lícitas. “Son operaciones de Inteligencia que están contempladas dentro de la Ley de Inteligencia y eso no tiene nada de irregular”. Sin embargo, no entregó ninguna prueba de la legalidad de esa actividad de inteligencia. Por ahora el escándalo ha determinado que este miércoles 12 de febrero el Senado se reúna con MinDefensa para hablar del caso.
Como en el resto del mundo, en Colombia las normas sobre actividades de inteligencia del Estado son muy laxas. Han desaparecido garantías y se han reemplazado por órdenes que no protegen los derechos de los ciudadanos. Y, tal como se evidenció esta semana con el caso Andrómeda, se trata de un tema muy importante para todos los ciudadanos.
Para exigir el fin de estas prácticas y demandar el respeto a la privacidad, este 11 de febrero todos los usuarios de la red están invitados a suscribirse a los 13 principios contra la vigilancia masiva, y a hacer un llamado a los políticos para que se comprometan a defenderlos. En Colombia, los internautas están compartiendo en redes sociales el video ¿cómo nos vigilan en Internet?, además se pintarán murales y se desarrollará una Cryptoparty para hablar de vigilancia masiva y aprender de seguridad en línea, en el espacio HackBo, de Bogotá.
La protesta global estará en miles de páginas web, entre ellas la web colombiana http://redpatodos/internetsinchuzadas, y desde ya se viraliza en redes sociales con los HT #InternetSinChuzadas #stopspying. Desde RedPatodos, y la Fundación Karisma los invitamos a unirse a ¡defender el derecho a la privacidad!
Para más información sobre #InternetSinChuzadas, visite: http://redpatodos.co/internetsinchuzadas
