Qué: Gracias a una masiva oposición se pudo suspender una legislación de vigilancia en linea
Dónde: Canadá
Quién: OpenMedia.ca; CIPPIC
Lecciones Aprendidas
- Innovativas campañas en redes sociales pueden avivar el interés público.
- Siempre que sea posible hay que construir la oposición antes que las malas leyes sean introducidas.
- “La gente es inteligente. Déjalos ayudar” (Lindsey Pinto, OpenMedia.ca)
El Proyecto de Vigilancia
Desde finales de la década del 90, Canadá ha sido testigo de numerosas propuestas de las denominadas leyes de “acceso legal”, que buscan otorgar mayor poder de policía para interceptar las comunicaciones digitales y la información de acceso de los abonados sin una orden judicial. En principio, el último intento del gobierno para conseguir estos nuevos poderes se incluyó en un proyecto de ley general contra el delito, que incluía una serie de preocupantes disposiciones. Este paquete legislativo se pospuso en el otoño de 2011, pero ni bien los opositores de las prácticas invasivas de vigilancia respiraron aliviados, surgió el proyecto de ley canadiense C-30.
Introducido en el Día de San Valentín de 2012, la legislación autónoma de ciberespionaje habría obligado a los proveedores de servicios de Internet (ISPs, por su sigla en inglés) a entregar detalles de los registros de abonados a la policía sin orden judicial. “El proyecto de ley C-30 fue el último intento del gobierno de Canadá para actualizar su capacidad de vigilancia en línea, haciendo uso de la infraestructura de comunicaciones (ISPs, teléfonos móviles, proveedores de servicios en línea como Google, Twitter y Facebook) en contra de sus ciudadanos”, explica Tamir Israel de la Agencia Canadiense de Política de Internet y Clínica de Interés Público (Canadian Internet Policy and Public Interest Clinic, CIPPIC).
Sin embargo, cuando se levantó una ola de indignación popular en contra del proyecto de ley C-30, sus adeptos se pusieron a la defensiva - y el proyecto fue reenviado a la comisión, donde permaneció latente durante meses. Si bien este resultado marcó una victoria para los activistas anti-vigilancia, los opositores del C-30 temían que resurgiera a finales de 2012.
La Campaña
La oposición al proyecto de ley C-30 fue impulsada por una coalición de amplio alcance de ONGs, académicos y otras partes interesadas, incluida la EFF. La página web de la campaña Stop Online Spying fue impulsada por OpenMedia.ca, mientras que la Agencia Canadiense de Política de Internet y Clínica de Interés Público (CIPPIC) utilizó su experiencia legal para analizar el proyecto de ley y encontrar agujeros en el argumento del gobierno. Las dos organizaciones trabajaron en forma colaborativa para construir una coalición y fortalecer la oposición.
Un exitoso elemento de la campaña fue el uso de Twitter para difundir el mensaje de una manera entretenida. Para mostrar su oposición se alentó a que los usuarios publicaran actualizaciones de estado con detalles triviales de sus vidas dirigidas al ministro de seguridad pública Vic Toews, uno de los arquitectos del proyecto de ley C-30. Unificados bajo el hashtag #TellVicEverything (#CuéntaleTodoaVic), los opositores enterraron la cuenta de Twitter de Toews bajo una avalancha de tweets con revelaciones tales como “Hoy tomé mi cereal con leche de soja. Todavía estoy indeciso al respecto”. La frase #TellVicEverything llegó a ser trending topic a nivel mundial en Twitter, una marca de toma de conciencia en la era digital.
“Ayudó a que los canadienses entendieran cuán excesivo era este proyecto de ley”, explica la Gerente de Comunicaciones Lindsey Pinto. “Involucró y comprometió a más gente, y creó un circuito de retroalimentación - lo que hizo difícil que los medios lo ignoraran.”
Otro componente creativo de la campaña Stop Online Spying fue una serie de videos de alta calidad de emisión realizado por voluntarios, que fueron publicados en línea y salieron al aire en televisión. “Debés permitir que la gente ayude y te diga: ‘Tengo una habilidad y quiero usarla’”, aconseja Pinto. “La gente es inteligente - déjalos ayudar”.
La legislación propuesta también atrajo una condena generalizada de los expertos en privacidad, comisionados de privacidad (incluyendo preocupaciones específicas del Comisionado federal de Canada y de la provincia de Ontario, así como las preocupaciones generales en representación colectiva de todos los agentes de privacidad canadienses), empresas de telecomunicaciones y de los principales diarios canadienses.
La Estrategia
Las estrategias tanto alrededor de la selección del momento oportuno y del mensaje preciso ayudaron al éxito de los esfuerzos para detener el proyecto de ley C-30. En primer lugar, los opositores comenzaron a hacer campaña incluso antes de que el proyecto de ley fuera presentado. “Nos aseguramos de hacerlo temprano, después de que supimos que la iniciativa iba a presentarse, pero antes de que el gobierno estuviera dispuesto a seguir adelante con ella de una manera seria”, afirma Israel. “Por ejemplo, organizamos una mesa redonda entre las partes interesadas, con representantes de una amplia gama de grupos e individuos... a un mes del renacimiento de la legislación a principios de 2011. Creo que tener nuestra coalición en su lugar y funcionando de manera temprana/preventiva fue fundamental.”
Para el momento que el proyecto de ley C-30 entró oficialmente en consideración, unas 40 mil personas ya habían firmado la petición de Stop Online Spying. Ese número eventualmente alcanzó las 147 mil firmas.
En cuanto a los mensajes, CIPPIC y otros tuvieron que encontrar la manera de contrarrestar los puntos de discusión del gobierno. Por ejemplo, el gobierno había afirmado que no había puesto en marcha nada invasivo de la privacidad y había intentado describir los datos en línea como algo similar a la información que se puede encontrar en una agenda telefónica. Sin embargo, para desacreditar esta idea, los opositores al C-30 utilizaron la analogía de las huellas, que podrían ser utilizadas para rastrear cada paso de cada persona.
La coalición también demostró que aún no se había demostrado la necesidad de esta legislación, lo que resultaría en un exceso de amplios poderes, que poco tenían que ver con la aplicación real de los problemas en el ámbito técnico que la ley decía que estaba tratando de resolver. Por último, el proyecto fue presentada en el Parlamento como una legislación contra la “pornografía infantil”. La coalición también desmintió este mito explicando en detalle cómo el proyecto de ley tenía poco o nada que ver con la explotación infantil.
“Esta capacidad de proporcionar una gama completa de mensajes (y de hacerlo temprano) de manera coordinada fue crítico", señala Israel. “Garantizó que todos nuestros mensajes fueran directo al grano, despertando conciencia y proporcionando suficiente información a la prensa para que se comprendiera la verdadera naturaleza de la legislación. Por ejemplo, cuando el gobierno anunció que ‘esta legislación es sobre pornografía infantil’, los medios de comunicación pudieron acceder directamente a las fuentes que explicaban de forma muy clara y concreta, con referencias a la legislación, como éste no era el caso.”
Recursos
OpenMedia.ca
Canadian Internet Policy and Public Interest Clinic
Experto en privacidad Michael Geist
Guest Blog: Tamir Israel, el abogado experto en tecnología de CIPPIC, desacredita los mitos alrededor del ciberespionaje
http://openmedia.ca/blog/guest-blog-cippic-tech-lawyer-tamir-israel-debunks-government-myths-online-spyinghttp://openmedia.ca/blog/guest-blog-cippic-tech-lawyer-tamir-israel-debunks-government-myths-online-spying
“Siempre vigilante”. Reporte del Comisionado de Privacidad de Ontario Ann Cavoukian
http://www.ipc.on.ca/images/Resources/2012-06-04-2011_Annual_Report.pdf
Herramienta para escribir peticiones del Comisionado de Privacidad de Ontario
http://www.realprivacy.ca/write-my-mp
Petición Stop Online Spying
Carta a la Seguridad Pública de los Comisionados de Privacidad de Canadá
http://www.priv.gc.ca/media/nr-c/2011/let_110309_e.asp
Equipo Internacional de la EFF
https://www.eff.org/issues/international